¿Alguna vez te han dado una receta y has seguido las instrucciones al pie de la letra, pero el sabor del plato era totalmente diferente al que habías probado de manos del que te dio esa receta? Pues con la escritura igual, todas son distintas, porque distintas son las manos que cogen el bolígrafo, por eso te explicamos qué tipo de bolígrafo se adapta mejor a tu escritura.
Los tipos de bolígrafo que existen
Cuando pensamos en un bolígrafo, a todos se nos viene a la cabeza el típico de tinta azul o los que regalan como publicidad. Pero existe un universo muy amplio con modelos para todos los gustos:
- Plumas. Para los más clásicos, no se trata de un bolígrafo al uso, pero es una herramienta más con la que se puede escribir. Es perfecta para aquellos amantes de los objetos vintage, la caligrafía y que la utilicen en ocasiones especiales como la firma de documentos o el manuscrito de cartas importantes. Es incómoda para un uso diario, ya que pueden sufrirse accidentes con la tinta y su recarga es demasiado asidua.
- Rollers. Son bolígrafos que permiten una calidad en la escritura parecida a la pluma, pero con la comodidad de un bolígrafo, es fácil de usar gracias a su punta de bola rodante que no se engancha en el papel. Los rollers pueden ser de tinta líquida (ideal para los que escriben ejerciendo mucha presión sobre el papel o para rellenar documentos que se calcan) o tinta gel (aquí se incluyen colores metalizados y muy brillantes, ideales para felicitaciones).
- Tinta de aceite. Se trata de los bolígrafos más utilizados por su precio económico, durabilidad y facilidad para escribir. Su tinta es más viscosa y se seca muy rápidamente. Resistentes al desgaste, se recomiendan para la escritura en documentos oficiales y para el día a día, ya que no manchan por su rápido secado.
Lo que debemos tener en cuenta antes de elegir un bolígrafo
Existen una serie de circunstancias que se deben tener en cuenta antes de elegir un bolígrafo. No es lo mismo utilizarlo para hacer la lista de la compra, que para hacer unas oposiciones o coger apuntes.
- El uso. Como decíamos, dependiendo de las circunstancias en las que necesitemos utilizar el bolígrafo nos irá mejor uno u otro. Si vas a escribir mucho lo mejor es optar por uno que sea ligero, ergonómico y que no tenga una tinta demasiado líquida porque tardará en secarse, nos mancharemos las manos y puede explotar.
- Peso y tamaño. Se trata de dos cuestiones que pueden inclinar la balanza de la comodidad hacia un lado o hacia otro. Si vas a utilizarlo mucho, y como ya hemos dicho, lo mejor es decantarse por un modelo pequeño, que también pesará menos y facilitará la tarea de la escritura.
- Recargas. No todos los bolígrafos pueden recargarse, la mayoría son de usar y tirar. Algo a tener en cuenta si queremos conservar un modelo o nos da igual cambiarlo asiduamente. En el caso de utilizarlo frecuentemente se recomienda uno recargable, ya que saldrá mucho más a cuenta.