Es habitual que cuando nos gusta un chico o una chica estemos ansiosos por saber si la otra persona siente lo mismo por nosotros. Lo más fácil l sería, a priori, preguntar a la otra persona directamente, pero los miedos y el miedo al rechazo que nos acompañan a casi todos no son buenos aliados para dar este paso.

Señales para saber si le gustas a alguien

Te mira fijamente a los ojos (o a la boca)

Una persona interesada en ti te mirará ente mucho y muchísimo. A veces abiertamente y, otras, disimuladamente. Si aún os conocéis poco esto te hará darte cuenta de que quiere en conocerte más. Y si ya habéis tenido más contacto, fíjate en dónde te mira cuando habláis. Si lo hace a los ojos con mucha atención o a la boca fijamente es que lo tienes en el saco.

Te escribe mucho

Todos conocemos muchas excusas: me encuentro mal, he estado muy liado, no tenía cobertura y un largo etcétera. Pero cuando le gustas a alguien lo más habitual es que esté muy pendiente de ti y te escriba aunque esté viendo el capítulo final de su serie favorita en directo (al menos al principio, que luego ya se sabe…).

Sonríe

Hasta si te has pillado del tío o la tía más borde del planeta notarás que le cambia la cara cuando te mira. Y es que, es automático, cuando nos gusta alguien la sonrisa no se nos borra de la cara. Ya verás, ¡pruébalo. Piensa en él o ella. ¿Lo ves?

Está por ti

Cuando le gustas a alguien tiene ganas de saber de ti y, por tanto, te escuchará con atencion, aunque le cuentes la historia con menos interés de la historia. Todo lo que gigas le parecerá interesante.

Es detallista

Aquí no nos referimos a los típicos bombones o un ramo de flores. Es que tenga detalles contigo que te hagan ver que piense en ti. También es, por ejemplo, que se acuerde de aquello que no te gusta.

Buscar el contacto físico

Aquí no nos referimos a sobeteo ¡Solo faltaría! Pero sí que es verdad que cuando nos gusta alguien acostumbramos a buscar el contacto físico. Y esto, se repite en todas las etapas de una relación; desde las primeras veces que os veis hasta cuando ya lleváis un tiempo saliendo.

¿Te sudan las manos? ¿Tienes las mejillas coloradas? ¿Elevas la voz? Es muy probable que estés enamorada o enamorado. Tu cuerpo cuando te enamoras sufre una serie de cambio fisiológicos que es bueno conocer. Quizá descubres algunos de ellos en tu crush cuando te mira…

Síntomas que notas en tu cuerpo cuando te enamoras

Generamos muchas sustancias

El amor no proviene del corazón, sino que nos enamoramos por el cerebro que gracias a sus glándulas se generan sustancias como la Feniletilamina, responsable de la sensación de mariposas y sudoración, Dopamina, responsable de la fidelidad y la Adrenalina, encargada de las emociones que afectan el corazón y pueden generar taquicardia.

Esta alteración hormonal incluso de divide en dos fases:

Primera etapa: la otra persona nos empieza a gustar y empezamos a sentir deseo por ella. Aquí se segrega adrenalina y aparece el deseo gracias a hormonas sexuales como la testosterona. Además, también segregamos estrógenos y feromonas, que secretan un olor muy característico en cada persona y muy atrayente.

Segunda etapa: el enamoramiento propiamente dicho. En esta etapa aparece la Feniletilamina encargada de la sensación de felicidad máxima. También aparecen la Dopamina y Epinefrina responsable de las conductas y las locuras del amor.

Durante estas etapas también están presentes la Serotonina, que es la que se encarga, básicamente, del control en la conducta de enamoramiento. Y la a oxitocina, conocida también como la hormona del abrazo, da la tranquilidad y el apego característico de esta etapa.

Subimos la voz

Sí, suena y parece muy raro, pero cuando te enamoras elevas un poco la voz. Los expertos señalan que las mujeres cuando se enamoran tienden a poner una voz cada vez más “femenina”. Es decir, cada vez más más aguda y alta.

Podemos tener problemas para dormir

No es algo que pase siempre, pero hay personas que cuando se enamoran tienen, sobre todo al principio, problemas para dormir. Esto se debe, esencialmente, a los cambios hormonales que se dan durante este bonito proceso.

Las pupilas se nos dilatan

Cuando estás junto a la persona que te gusta mucho, existe la llamada estimulación del sistema nervioso simpático. Esto hace que las pupilas de tus ojos se dilaten. ¡Mucha atención!

Netflix ha cambiado nuestra manera de ver series y películas. Esta plataforma no solo ha tenido incidencia en la televisión convencional, la que conocemos como TDT, también lo ha hecho sobre las cadenas más prestigiosas de revisión por cable. ¿Su secreto? No solo es uno, está claro, pero el punto de inflexión más importante es la adquisición y producción de su propio contenido original.

Netflix, que empezó como lo que podemos considerando un videoclub online, ganándole espacio también a la piratería, ha crecido a un ritmo de vértigo. Hoy en día posee más de 100 millones de suscriptores en más de 190 países. Éstos tienen accesos a todas las películas y series que se encuentran en su catálogo.

Pero seguro que hay secretillos que no conoces. Y nosotros te desvelamos ahora algunos de ellos.

Con Netflix pasamos más tiempo consumiendo contenido audiovisual

Se calcula que un suscriptor de Netflix pasa casi 90 minutos al día viendo algún contenido de la plataforma online. Es decir, lo equivalente a ver cada día cuatro episodios de Esto equivale a mirar cuatro capítulos de The end of the f***ing world o cualquier otra serie cuyos capítulos duren unos veinte minutos.

Secretos secretísimos

Los trabajadores de Netflix firman un contrato en el que se comprometen a no revelar  el lugar en el que se guardan los DVD’s que almacenan el contenido. Entre sus empleados, se encuentran los inspectores, que son los encargados de inspeccionar y limpiar cada DVD que posee la compañía.

Anterior a Google

Reed Hastings, CEO de Netflix, tuvo la idea de crear esta plataforma de contenido audiovisual en movimiento en el año 1997, cuando Blockbuster, la compañía mundial más grande de videoclubs de la época, le hizo pagar una multa de 40 dólares por devolver una película más tarde de lo debido. Google no apareció en escena hasta el año 1998.

Trabajar en Netflix. Un sueño (para mucho) hecho realidad

Las personas encargadas de indexar el contenido de la plataforma trabajan desde casa viendo el contenido que Netflix compra o produce. Su función básica consiste en etiquetar el contenido con unas 1.000 palabras clave con el objetivo de mejorar las recomendaciones que se le hacen a cada suscritor. El salario para los que acaban de empezar es de 18 dólares la hora más una hora de suscripción gratuita a Netflix. Además, pueden cogerse todos los días de vacaciones que quieran. Lo único que se les pide es que entreguen el trabajo que se les demanda en el tiempo establecido.

Netflix tiene sus propios premios, The Flixies.

Es un espectáculo de premios bastante alegre y con un toque de humor irónico donde se invita a los usuarios a votar por sus programas favoritos. Las categorías están diseñadas para reflejar y celebrar la nueva forma en que la gente consume entretenimiento en línea.

Seguro que desde hace un tiempo no paras de oír hablar de poliamor. Pero, también seguro, que tienes preguntas y dudas. Aquí te tratamos de dar respuesta a alguna de ellas. Si ya lo sabías y tienes más información o, por el contrario, tienes dudas que no hemos resuelto, ¡los comentarios son todo tuyos! Y también los DM de Instagram.

¿Qué es el poliamor?

El poliamor consiste en amar a varias personas a la vez, de forma consensuada, consciente y ética. Quienes lo defienden huyen del constructo del amor romántico (el amor de Disney que se nos ha mostrado desde pequeños) y consideran que el amor no tiene que estar restringido. Argumentan que cuando se quiere a una persona lo que se desea es lo mejor para ella y esto incluye poder ampliar su vida amorosa y sentimental. La condición inquebrantable en el poliamor es el amor entre las personas y la aceptación de la relación por parte de todas ellas.

Preguntas frecuentes sobre poliamor

¿Poliamor y poligamia son los mismo?

La respuesta es rotunda, no. El término poligamia se usa para describir a un hombre una mujer casados que tienes relaciones con personas de su sexo contrario. Está claro que ésta es una definición muy clásica en tanto que contempla matrimonio y que las personas sean del sexo contrario; es decir, la heterosexualidad. El poliamor implica amor y conocimiento y aceptación entre las partes; en ningún caso tiene en cuenta ni el estado civil ni el género. El poliamor no se centra en las relaciones extramatrimoniales sin conocimiento y/o consentimiento.

¿Qué tipologías tienen las relaciones poliamorosas?

Las relaciones poliamorosas no disponen de una estructura típica. Hay casi tantas tipologías como personas poliamorosas y relaciones entre ellas. Nos podemos encontrar, por ejemplo, que una persona tenga dos amantes sin que ellos estén con nadie más o que ellos, a su vez tengan otros. También se puede dar la situación de que dos amantes sean relación principal y tengan otro como relación secundaria compartido. Esta relación por supuesto no se tiene que dar entre personas de diferentes géneros; hay personas poliamorosas heterosexuales, homosexuales, pansexuales, bisexuales, etc. Lo que es importante, sea cual sea la estructura y la tendencia sexual de cada una de las partes, que sea acordada por todas las partes implicadas con sinceridad y mucho respeto.

Si estás pensando que es complicado, estás en lo cierto. La vida poliamorosa no acostumbran a ir de la mano de la facilidad porque requieren una deconstrucción previa de toda la socialización que se nos ha hecho desde la heteropatriarcalidad y el amor romántico. Y, después, y muchas veces incluso paralelamente, hace falta mucha conciencia, honestidad y comunicación. Pero las personas poliamorosas afirman que vale la pena por la riqueza que supone tener una relación de responsabilidad afectiva con más de una persona.

¿Qué pasa con el sexo?

El poliamor se basa más en el amor que en el sexo. La parte sexual está presente en la mayoría de relaciones poliamorosas, pero la intimidad está por encima.Las personas asexuales también pueden ser poliamorosas: el sexo no es una condición imprescindible para que haya una relación de este tipo.

La honestidad y la confianza necesarias en una relación poliamorosa son particularmente importantes en lo que se refiere al sexo seguro. Cada persona tiene que acordar con cada una de sus parejas cuáles son las medidas de protección adecuadas, no sólo entre ellos dos, sino también de cada uno con el resto de sus amantes.

Seguro que últimamente has oído mucho de la copa menstrual, pero su patente se remonta al 1.932 y su uso se conoce desde 1.867. Pero este auge tiene más sentido que nunca en un contexto en el que el cuidado del medio ambiente se impone como necesidad. Es por ello que en los últimos cinco años, las ventas han aumentado un 98%.

¿Qué es y cómo funciona la copa menstrual?

Es un producto que tiene forma de cono o embudo y que, generalmente, está fabricado con silicona. Se puede lavar y, por tanto, reutilizar. Es decir, es un producto ecológico que nos permite poder mantener una buena higiene durante la menstruación sin necesidad de desechar compresas y tampones cada 4 o 6 horas.
La copa menstrual se coloca en la vagina, como si de un aro anticonceptivo se tratara, y se retira al cabo de las horas. Se puede llevar hasta 12 horas seguidas. Al ser un producto flexible, se adapta perfectamente a la cavidad vaginal, por lo que la mayoría de las mujeres no sienten molestias.

Ventajas de la copa menstrual

Ecología

Una sola copa menstrual sustituye a todos los tampones y compresas que usamos a lo largo de, aproximadamente, 10 años, que es el que se calcula que es el tiempo de vida medio de una copa menstrual. Con lo que, sin tener privarnos de ninguna comodidad, podemos usar un producto que se calcula que ahorrará aproximadamente 170 kilos de residuos por mujer.

En este punto es necesario tener en cuenta que según la organización ecofeminista Women’s Environmental Network, hasta el 90% de una compresa y el 6% de un tampón es plástico. El resto es pulpa de madera, rayón o algodón. A esto hay que sumarle el plástico de aplicadores y envoltorios. Los aplicadores están hechos a base de polietileno y polipropileno, materiales que también se añaden a la cuerda del tampón para que sea más resistente, los dos principales plásticos hallados en los océanos. Y aunque la mayoría de estos artículos menstruales de un solo uso acaban en vertederos, no pocos se desechan erróneamente en el váter y terminan abriéndose camino al mar.

Económica

El precio de una copa menstrual oscila entre 15 y 30 euros. Aunque hay supermercados de masas como Mercadona que la llegan a vender incluso más barata, a 9 euros. Calcula, teniendo en cuenta que la vida media de una copa menstrual bien cuidada es de 10 años, cuanto dinero te estás ahorrando. Da igual que seas de letras, los números salen rápido… ¡sale a cuenta!

No tóxica

También es importante señalar que las marcas más conocidas de compresas y tampones suelen ser una mezcla de pulpa de celulosa, plásticos y fibras sintéticas, como el rayón y la viscosa. Contienen, por tanto, sustancias químicas que, evidentemente, pueden causar reacción en contacto con el cuerpo. La copa menstrual no contiene ninguno de estos elementos.